- En el caso de que esté en tratamiento con este medicamento para suprimir la lactancia, no se debe amamantar al
bebé ni extraer la leche. Si detecta la aparición de dolor de cabeza persistente o aumento de la tensión
arterial, debe de comunicárselo a su médico ya que probablemente deba de interrumpir el tratamiento.
- Si recibe el tratamiento debido a una mastitis, normalmente será suficiente con el tratamiento con
lisurida, pero en caso de que le aparezca fiebre o un absceso, su médico le recetará también otros
medicamentos como antibióticos.
- La infertilidad inducida por prolactina puede ser tratada con lisurida. Sin embargo, mientras no se desee
un embarazo, se debe utilizar algún método anticonceptivo. La administración de este fármaco debe interrumpirse tan pronto se sospeche un embarazo.
- Si el motivo del tratamiento es un adenoma hipofisario (prolactinoma), deberá comunicar a su médico si
detecta síntomas que sugieren un crecimiento del tumor como dolores de cabeza persistentes y severos o
alteraciones de la visión.
Informe a su médico si padece o ha padecido enfermedades del riñón. Las personas con alteración de la
función renal, y especialmente aquellas sometidas a diálisis, son especialmente sensibles a medicamentos
como lisurida. Por tanto, necesitará comenzar el tratamiento con la dosis más baja posible, y
posteriormente aumentarla lentamente.
Informe a su médico si padece o ha padecido enfermedades del hígado. En estos casos se debe tener
especial cuidado con la dosis, que debe mantenerse baja.
Su médico debe valorar cuidadosamente el tratamiento con lisurida si padece trastornos graves de la
circulación arterial, tanto periféricos como cardíacos (enfermedad coronaria).
Incluso cuando se administra según las instrucciones, lisurida puede, muy ocasionalmente, provocar una
disminución brusca de la tensión arterial y, de esta forma, afectar al tiempo de reacción, hasta el punto de
que la capacidad para conducir o manejar maquinaria puede verse afectada. Si la disminución de la
tensión arterial llegase a producir un cuadro sincopal (desmayo), se deberá colocar al paciente en posición
horizontal con las piernas elevadas.
Si en ocasiones, se duerme de forma repentina a lo largo del día (episodios de sueño repentinos) o
experimenta un adormecimiento excesivo (somnolencia) durante el día, deberá consultar con su médico.
Esta medicina es un derivado ergótico. Tras la utilización prolongada de medicamentos como lisurida se han
detectado alteraciones inflamatorias de las membranas que recubren los pulmones (pleura), el corazón
(pericarditis) o el abdomen (fibrosis retroperitoneal). Si usted ha padecido alguno de estos trastornos
previamente, no debe tomarla. Consulte con su médico si tiene síntomas que puedan sugerir una
afectación del pulmón, riñón o corazón, como dificultad al respirar, fatiga, tos persistente, dolor torácico o abdominal, edemas o hinchazón de las piernas, masas o dolor a la palpación en el abdomen. En caso de que su médico sospeche que tales síntomas pueden ser debidos a una alteración inflamatoria, le
suspenderá el tratamiento. Asimismo, debe informar a su médico si tiene o ha tenido reacciones fibróticas (tejido de cicatrización) que han afectado al corazón, los
pulmones o el abdomen. Antes del tratamiento, su médico puede comprobar si su corazón, sus pulmones
y sus riñones se encuentran en buen estado. Durante el tratamiento, su médico prestará especial atención a
todo signo que pudiera guardar relación con la existencia de reacciones fibróticas. Si es necesario, se le
realizará un ecocardiograma (ecografía del corazón). En caso de producirse reacciones fibróticas, será
necesario suspender el tratamiento.
Si usted padece o ha padecido psicosis, informe a su médico. Éste debe sopesar cuidadosamente los
riesgos frente a los beneficios, ya que puede producirse un deterioro o una reaparición de los síntomas.
Antes de iniciar el tratamiento con lisurida deben realizarse las pruebas apropiadas, teniendo en cuenta
las contraindicaciones y precauciones especiales de empleo anteriormente mencionadas.
Recuerde que el médico le ha recetado este medicamento sólo a usted. Nunca debe dárselo a otra persona.
En caso de duda, consulte con su médico.
Uso de otros medicamentos
Informe a su médico o farmacéutico si está utilizando o ha utilizado recientemente otros
medicamentos, incluso los productos de plantas medicinales o los adquiridos sin receta.
Es especialmente importante que informe a su médico si utiliza alguno de los siguientes medicamentos,
ya que puede resultar necesario modificar la dosis de lisurida o incluso interrumpir el tratamiento con
alguno de los medicamentos:
- Medicamentos para el tratamiento de las psicosis: neurolépticos y otros antagonistas
dopaminérgicos (p. ej., haloperidol, sulpirida, metoclopramida, clorpromazina).
- Domperidona.
- Como precaución, lisurida no debe ser utilizado junto a otros alcaloides ergotamínicos (p. ej.
metil-ergometrina) después del parto y en el período puerperal.
- Medicamentos para controlar la hipertensión arterial.
Uso de lisurida con alimentos y bebidas
Los comprimidos se deben tomar siempre con algo de alimento.
Embarazo y lactancia
Consulte siempre con su médico o farmacéutico antes de tomar un medicamento durante el embarazo o la lactancia.
Lisurida no debe ser utilizado durante el embarazo. Si se queda embarazada, o desea quedarse
embarazada mientras está empleando este medicamento, hágaselo saber a su médico.
Conducción y uso de máquinas
El tratamiento con lisurida puede afectar la capacidad para conducir o manejar maquinaria, ya que
puede causar somnolencia (adormecimiento excesivo). Por ello, no debe conducir vehículos o realizar
actividades en las que una falta de atención pueda ponerle a Vd. o a los demás en peligro de muerte o de
daño grave (p. ej., utilización de maquinaria), a no ser que Vd. haya conseguido superar la somnolencia.
Consulte a su médico o farmacéutico antes de utilizar cualquier medicamento.